En Via Lúdica tenemos una amplia gama de juegos de mesa a la venta para todas las edades y públicos. Tal y como comentamos en nuestro artículo 3 juegos de mesa después del Catan, cuando alguien nos pregunta por un juego de mesa para alguien que no ha jugado nunca a ningún juego moderno, normalmente recomendamos Catan y Carcassonne. Dos juegos ideales para toda la familia y para jugar con los amigos.

La recomendación para adultos es clara, pero, ¿y cuando nos preguntan por un juego para un niño? Si este ronda los seis años el ideal es Dobble. Si ronda los ocho, recomendamos Fantasma Blitz. Dos juegos en los qué pequeños y grandes competirán en igualdad de condiciones y se lo pasará bien toda la familia.

Dobble es un juego con un componente matemático en el diseño muy fuerte. El juego nos presenta un mazo de cincuenta y cinco cartas con ocho símbols en cada una. En total hay cincuenta y siete símbolos repartidos entre todas las cartas y siempre entre dos cartas cualquiera encontraremos un único objeto repetido.

El juego se puede jugar de diferentes manera pues incorpora varios minijuegos. Todos ellos requieren que los jugadores sean rápidos a la hora de encontrar el objeto en común entre dos cartas. Por lo tanto estamos delante de un juego de agilidad visual.

El minijuego más habitual es el siguiente. Se reparte a cada jugador una carta que pone delante suyo. Se gira una carta en el centro de la mesa y todos los jugadores tienen que buscar el objeto en común entre su carta y la central. El jugador más rápido en encontrarlo ganará la carta y la colocará sobre la carta que tenía originalment. De esta manera los jugadores formarán pilas de cartas delante suyo y jugarán siempre con la que tengan encima. Por tanto en este juego no sirve memorizar los objetos de nuestra carta pues ésta cambia constantemente.

Dobble es un juego de pequeños formato que es ideal para llevar siempre encima. Un juego que encantará a los más pequeños y a los más grandes.

Fantasma Blitz también es un juego con un componente matemático en el diseño muy importante. Tenemos cinco objetos de madera de diferente color y una baraja de sesenta cartas. Estas cartas siempre representarán dos objetos, pero no siempre tendrán el color de la figura de madera, sino que combinarán los cinco objetos y los cinco colores siempre de dos en dos. De aquí salen las sesenta cartas que incorpora el juego.

Este juego también tiene variantes y se puede combinar con Fantasma Blitz 2.0 para tener aún más variedad. La versión básica del juego nos dice que tenemos que colocar las cinco figuras en el centro de la mesa y mostrar una carta. Todos los jugadores a la vez tendrán que ir a buscar el objeto correcto en función de lo que muestre la carta.

Si en la carta hay un objeto representado con su color de verdad, es decir, el de la pieza de madera, todos los jugadores tendrán que intentar coger aquel objeto. El primer jugador en hacerlo ganará la carta como punto. Si un jugador se equivoca perderá uno de los puntos que hubiera acumulado.

Si en cambio en la carta no hay ningún objeto representado en su color verdadero, entonces los jugadores tendrán que coger el objeto que:

• no sale en la carta

• su color no sale en la carta

De esta manera en este juego encontramos un punto de dificultad más elevado que en Dobble. Además de ser un juego de agilidad visual trabajamos conceptos lógicos. Tenemos que discriminar entre los objetos que salen en la carta y los que no así como los colores.

Fantasma Blitz también es un juego de pequeño formato ideal para viajar. Los más pequeños disfrutarán compitiendo con los adultos.